miércoles, 19 de febrero de 2014

Mi valiente....









Para mi todas las canciones que hablan de valor me recuerdan a ti, me recuerdan a cómo te pedí que no me abandonaras, a cómo te suplique que te quedaras conmigo y entre lagrimas rezaba para que Dios cambiase de opinión si era tu momento,  ese tenebroso tercer día, prefiero sacarlo fuera, porque ese miedo a perderte a que te vayas, no se ha ido, nos ha acompañado todos los días, con los pitidos, valores, las noches en vela mirando los valores, cada cambio en ellos, cada  y ..... Que se yo, si sé que soy egoísta, quizá te hubiera sido más fácil irte, claro... pero no, estás aquí, gracias por no abandonarme a pesar de lo abrumados que estábamos con todo, del miedo que teníamos a todo, cada gesto, cada palabra, cada mirada, en la que quizá podíamos detectar como iba todo ya que nadie era claro. Eres valiente mi vida, eres muy valiente, con todo lo que te ha tocado y te tocará soportar. Cuanto esfuerzo, cuantas pruebas, cuantos lloros has tenido y yo solo puedo intentar consolarte, abrazarte, llenarte de besos e intentar compensarte por todo lo que has pasado. Si tal vez soy exagerada, emocional, posesiva, sobreprotectora y bla bla bla... pero ei, no hay nadie como tú y todo ese amor es el que te prometí a Dios darte si te dejaba a mi lado. Si claro chantaje total y absoluto, pero que no haría yo por ti y por tu hermana vida mía. Ahora voy a escuchar de nuevo la canción que me recuerda lo valiente que eres...el latido de tu corazón.

sábado, 8 de febrero de 2014

Imposible que me digan imposible






Nos encontramos con esta maldita palabra constantemente, en diferentes circunstancias, cosas que “imposible” sucedan, incluso antes de que nacieras ya nos dijeron que “imposible” quedarme embarazada, “imposible” tener hijos, etc. 

No necesitamos  “agentes” externos para decírnosla de forma negativa, ya nos valemos por nosotros mismos, pero en mi caso, baste que me digan “imposible” para que yo cabezona de mi lo intente, no importa las veces que me tropiece con quizá mis propias palabras, unas veces bravuconas, otras huyendo de un dolor extremadamente grande para poder asimilar y me resisto a aceptar que no se puede hacer nada y sé a ciencia cierta que seguiré hasta agotar todas las posibilidades a mi alcance. 

Cuando me dicen que acepte algo que no me gusta solo oigo que me resigne a no tener esperanzas, sé que habrá momentos difíciles pero eso es lo que nos hace crecer y conocer nuestra capacidad de superación. 

De verdad no sabes a donde puedes llegar hasta que estas hay, así que está vez voy a decir yo un par de esos “imposibles”. 

IMPOSIBLE que dejemos de luchar por todo lo mejor para ti y tu hermana.

IMPOSIBLE que dejemos de amarte… y esos son Imposibles de verdad…

Ya no soy la misma



No puedo ni quiero fingir que soy la misma, es imposible mirar a otro lado, hacer como que no ha pasado nada, sí ha pasado y es mi realidad, me he enamorado, hasta las trancas, un amor que templa mi alma con calidez, como los rayos del sol o me deja sin respiración por el pánico a perderlo, que a la vez te hace crecer cada día más.
Algunos me llaman radical, mala amiga o mil cosas más, otros se han permitido juzgarme, criticarme o intentan manipularme, que lástima, ya me he vacunado para eso.
Todo cambia por suerte, a cada instante, todas tus creencias, tus valores, todo cambia en segundos, es una de las grandes enseñanzas que ya ha pasado de ser algo que suena bien a sentirlo profundamente y vivirlo constantemente.
Cuando veo tu carita, tu mirada intensa, al abrazarte, al sentir tu calida piel, tu ternura, tu genio, tu… todo tu me enamoras.